La SEEP ofrece una serie de recomendaciones para disminuir la exposición a disruptores endocrinos, especialmente durante la gestación, lactancia y peripuberal. Estas incluyen ventilar a diario, evitar perfumes, ambientadores y ciertos cosméticos, priorizar alimentos frescos y naturales, reducir el uso de plásticos y elegir utensilios de cocina seguros. También aconseja limitar el tiempo de pantalla y priorizar tejidos naturales.